13 de septiembre de 2011

La Princesa que se Creía un Perro...


¿Y qué pasa cuando una princesa se cree que es un perro?
¿Y qué ocurre cuando una noche de verano sacas a pasear a tu perra de la mano de tu pequeña princesa, con la luna llena, una temperatura estupenda, una noche preciosa... Y tu princesa se quita la braguita, se levanta el vestido y empieza a levantar la pata y a chillar que ella quiere hacer pis en la hierba como "Lola", nuestra perra?
¿Y si la princesa se niega a andar? ¿Y si hace todo el camino a cuatro patas y ladrando?
¿Será una especie de Transtorno de Conversión? ¿Será que la cena le ha sentado fatal y le ha trastocado un poco la cabeza?
¿Mañana le tendré que dar de desayunar pienso en vez de ColaCao?
A veces la imaginación de los niños te lleva por caminos insospechados...
Me voy a acostar a Lola y ver si tiene agua la princesa en el bebedero...Buenas Noches.

12 de septiembre de 2011

Diccionario Princesa -Castellano (Parte II)

- PICORTERO= Aparato que vuela, parecido al avión pero con hélices, que duerme en helipuertos...

- GASOLINA= Masa blandita, que hasta ahora yo llamaba "Plastinita" (Véase Parte I del Diccionario)

- BRUJAS= Pompitas que salen del agua de los Jacuzzis (tipo de bañera que he descubierto este verano que me encanta).

- BRACITOS= Flotadores que se ponen en los brazos, como su propio nombre indica...

- BOLITAS= En singular, fenómeno marítimo a quien ya cantaba Rocío Jurado en "Como una Bola"...

9 de septiembre de 2011

Las Tiritas de Mickey...

- Princesa, hoy no iremos a ver al yayo, porque se ha caído con la bici y se ha hecho “pupu”.
- ¿Se ha hecho “pupu”? ¿En la cara?
- Si cariño, pero no te preocupes porque está con un médico que le está curando ¿vale? Igual mañana vamos a darle un besito.
- ¡Vale! ¡Y le llevamos la pegatina (tirita) de Mickey para que no tenga “pupu”!

     Es su más pura inocencia la que me tiene enamorada de la princesa. Y ella no sabe que en realidad, el yayo está en la UCI, que tiene varios huesos rotos, un neumotórax, una ceja cosida y una operación por delante. Pero ella, con su pensamiento mágico, va a curarle con sus tiritas de Mickey que tanto le gustan. Lo que su pensamiento mágico no alcanza a entender es que al yayo, con un solo beso de su princesa se le pasarán muchas de las “pupus”, o por lo menos le harán pensar menos en ellas.

Y espero que la princesa en un futuro llegue a valorar tanto la vida como lo hacemos sobre todo cuando pasan estas cosas. Y espero que sepa  que te pueden robar la vida en un momento, el día menos pensado. Y que por eso tenemos que disfrutar del aquí y del ahora, de los nuestros, de los que más queremos, y tenemos que hacerles saber cuánto disfrutamos con ellos y lo necesarios que son en nuestras vidas.

Pero a la princesa esto le viene aún muy grande, muy lejano… Y hasta entonces irá curando “pupus” de la cara con tiritas de Mickey, y “pupus” del alma, con sus besos…

¡Ánimo Aita! ¡Y recupérate pronto que la Princesa y yo te necesitamos!




8 de septiembre de 2011

El Camino Hacia la Autonomía III...

Y Noa ha vuelto más habladora que nunca, más señorita y a la vez con más carácter (por decirlo de una manera un poco sutil)... Ha crecido, y no solo de altura, sino de madurez, creo que la brisa marina trae consigo algún ingrediente secreto que aun no conocemos...
Y no hemos parado, hemos dormido, paseado, tomado el sol, la princesa ha perdido el miedo a la piscina y se ha tirado al agua cual kamikace, aunque no ha perdido el repelús a la arena y sigue encogiendo sus deditos de los pies y mientras la pisa dice "Mami, ¡Caca!"...
También ha experimentado la sensación de caerse desde 8 escaleras abajo de cabeza, teniendo la cara tatuada para casi todas las vacaciones, aunque milagrosamente no se rompió nada.
Hemos visto animales, ido a un parque acuático...¡Hasta ha ido al cine!¡Dos veces!
La llevamos a ver "Los Pitufos", con previsión de que duraría en la sala no más de 20 minutos. Le compramos unas chuches y... Se enamoró perdidamente de Pitufina. Estuvo toda la película atenta, feliz, bailando las canciones y probando varias butacas. 
Al terminar la película, aun sentada en una de ellas dijo "Mámá, Otra vez Los Pitufos, dale al botón"... Se levantó y me llevó de la mano hasta una indicación luminosa de EXIT que se encontraba bajo la pantalla... Claro, "el botón" era proporcional a la televisión...
Así que otro día repetimos la misma película en distinto cine, con el siguiente resultado: 
Cine 0 - Noa 2


El Camino Hacia la Autonomía II...

Lo que parecía un post compartiendo con vosotros mi gratificante experiencia con la lactancia materna, estaba lleno de una despedida inconsciente, no esperada y repentina, pero a la vez, igual de satisfactoria y cómoda.
Sí, como os contaba en el anterior post, estas vacaciones, Noa ha pasado de bebé a niña, ha decidido coger la maleta de juguetes y emprender "en serio" su camino hacia la autonomía.
El mismo día que le empezamos a quitar el pañal, decidió que ya no le hacía falta mi leche, que los mimos y los momentos de conexión entre las dos, los podía conseguir de otra manera, o simplemente, que ya no le gustaba su sabor. El caso, es que automática y sorpresivamente, ese día dejó de pedir teta. Es así como cuando nuevamente ella ha estado preparada para esta separación, esto ha ocurrido, de la forma más increíblemente natural que lo que hubiera imaginado.
Y aunque a quien no haya amamantado o a quien haya tenido una mala experiencia con el tema, le cueste creerlo, he tenido que elaborar el duelo de esta separación, como otra cualquiera, ir haciéndome a la idea de que la princesa crece y sigue necesitando "mamá" pero de otra forma, desde otra perspectiva. Y es un duelo que también nos despide de la etapa bebé para abrir paso a otra no menos bonita, aunque sí diferente...

2 de septiembre de 2011

El Camino Hacia la Autonomía...

Y volvemos a la rutina... Que de alguna manera, hacía falta, porque la princesa ha venido de sus vacaciones estivales, a demás de muy mayor, asilvestrada. Tenía ganas de retomar estos ratitos con el ordenador, pero a la vez, han sido unos días de tanto cambio (y a la vez, ninguno) que no sabía por donde empezar a contar.
Bueno, la primera noticia es que la princesa ya no usa pañal. Ha sido cuestión de 5-7 días, y desde el tercer día, tampoco lo ha usado por la noche. Si es que, además de ser lo más bonito del mundo, es una campeona...
Esto reafirma mi idea sobre nuestra intervención excesiva en el desarrollo de los niños, de que llegan los dos años, y muchas mamás se estresan (con ayuda de las abuelas, que no dejan de recordarnos que antes se quitaban los pañales mucho antes) y quieren quitar los pañales YA. O llega el verano y parece que es la época en la que, pensando más en el calendario que en nuestro príncipe o princesa, decidimos que tiene que estar preparado para contener sus esfínteres... O vemos asomar la etapa escolar y nos entra la prisa acuciante para dejar definitivamente el pañal, pensando nuevamente en la normativa más que en la evolución particular de nuestro pequeño. Y luego vienen tediosos procesos, padres preocupados, niños ansiosos por no poder complacer al adulto en su demanda de contener el pis o la caca, cuando en realidad no son capaces físicamente. Miramos al calendario, al colegio, a la edad cronológica...no a nuestro hijo y su naturaleza, a quien deberíamos escuchar un poquito más. En fin, que me pierdo...
Bueno, independientemente de que fuera verano, los que estábamos a su alrededor, sabíamos que la princesa estaba preparada para dejar el pañal, y jugando un poco y reforzándola cuando lograba llegar al orinal, los dejó de utilizar en 5 días. Al segundo día (utilizando solo el pañal de noche), y cuando descubrió el placer de ir de nudista por la vida, la princesa se inventó la excusa de que el pañal, por la noche "le hacía pupu". Así que, con plena confianza en la capacidad de mi niña, la tercera noche lo quitamos definitivamente. 
Y así, hasta el día de hoy (exceptuando una tarde, que estaba más nerviosa y tuvo algún escape). 
Mi niña ha dejado los pañales con dos años y medio, tarde para muchos, pero ha sido algo relajado, breve y divertido para las dos. Los ha dejado, cuando ha sido emocional y físicamente capaz, y cuando los demás, hemos confiado, de verdad, en ella.

Por cierto, lo de asilvestrada lo decía en parte porque ahora que hemos vuelto del paraíso a la rutina, Noa le ha cogido gusto a sentir el airecito por todo su cuerpo y sigue empeñada en desnudarse en todos los sitios...¡Por lo menos el pañal le tapaba el culo!

Pero este no ha sido su único pasito en el camino hacia la autonomía de la princesa...