15 de enero de 2012

Yo Solita...

Ya han pasado las Navidades, parecía que nunca iba a ocurrir este año. Y ha llegado la bendita rutina, el orden, la estructura...que tan bien nos viene a todos. Se acabaron las comilonas, la gente estresada, comprando sin parar, los mensajes contradictorios de la sociedad... La verdad es que este año han sido un poco complicadas. Quizás para la princesa, más de lo que esperábamos...Bien es cierto que ha habido días de mucha magia, caritas para no olvidar... Pero Noa ha sido un torbellino de emociones que nos ha resultado difícil gestionar... 
Como resultado y desde el día de Nochebuena, la Princesa ha comenzado a tartamudear. Y mucho. Vamos, que mantener hoy en día una conversación con ella, requiere de paciencia y mucho amor para no terminar por acabar sus frases o hacer la gracia repitiendo su "cacareo"... Bueno, yo lo achaco a la situación, por demasiadas coincidencias... Ahora, esperaremos que poco a poco remita, que sea una expresión como cualquier otra de su agujero en la tripita, pasajera. Hoy ya me he dado cuenta de que parece que ha disminuido un poco.
También ha habido avances en este tiempo... Un buen día, la Princesa decidió hacerse más mayor aun... Y desde entonces, todo lo quiere hacer SOLITA. Quiere vestirse, desvestirse, comer y dormir SOLITA...¡Si, si... DORMIR SOLITA! Hasta ahora yo le ayudaba a dormirse porque no hay cosa que más le relaje que acariciarme el pelo, olerlo... Pero un día pensó que ella podía dormirse sola... y hasta hoy, que van a hacer 10 días... Es una campeona.

Bueno, se ha soltado hasta en la piscina. A pesar de que va a la piscina tres días por semana, le tiene mucho respeto al agua (por no llamarlo miedo). Se siente insegura y hasta ahora necesitaba sentir mi mano o la de su papá para estar tranquila. El otro día le dijo a su papá el ya famoso "Papá, YO SOLITA", y con manguitos (eso sí) estuvo nadando por la piscina unos 20 minutos...

Es precioso ver como crecen los niños, cómo ellos mismos van reclamando su autonomía. Cómo la Naturaleza es muy sabia y no son precisos superprogramas de estimulación o presiones para que dejen el tete, aprendan a dormir o aprendan a ser independientes. Es cuestión, principalmente, de CONFIANZA. De confianza en tu hijo o hija. De que lo hará y será muy capaz de ello. Nuestra tarea es dejarles el espacio, darles la oportunidad de que lo intenten y CONFIAR en que lo harán. Y si a la primera no son capaces, no pasará nada, porque les llegará el momento en el que estén maduros. Para dormir solitos, vestirse, o dejar de tartamudear...

2 comentarios:

  1. ¡Muy bonito Peti!
    Lo estáis haciendo genial con la "mini Peti"!
    Un abrazooo

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  2. ¡Solo te falta conocerla de nuevo! ¡Te estoy esperando! Un abrazoooo...

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